Outlander

Cuando su marido desaparece repentinamente, Riley Parks entra a trabajar como masajista en un spa. Pero cuando se entera de que su nuevo empleo requerirá atender las necesidades especiales de sus clientes, Riley debe considerar si tiene lo que hace falta.

Mientras lucha al ser dejada por su marido que la dejó con sus dos hijos, Riley (Jennifer Love Hewitt) encuentra pruebas que sugieren que él estaba con otra. Mientras tanto, Linette (Cybill Shepherd) trata de ocultarle un secreto a su nuevo pretendiente.

La complicada vida doméstica de Riley (Jennifer Love Hewitt) interfiere con el trabajo, y ella afronta el desafío de una compañera de trabajo celosa mientras intenta evitar que su familia se arruine.

Aún poco dispuesta a aceptar la desaparición de su marido, Riley se niega a asistir a un baile benéfico anual. La cita de un amigo con Riley hace que Kendra se preocupe por que su prometido se entere de lo que realmente sucede en The Rub.

Mientras un involuntario contacto íntimo en la mesa de masajes provoca que a Riley le pidan una cita, la resolución de Linette de ir despacio es puesta a prueba cuando su nuevo novio la invita a pasar un fin de semana romántica en Nueva Orleans.

Mientras las sospechas sobre una posible redada causan una merma en el trabajo, Riley intenta evitar que Lacey sepa demasiado sobre lo que sucede en The Rub. Mientras tanto, a Riley le preocupa involucrarse demasiado con un atractivo papá soltero.

Riley ofrece ayuda a una cliente torpe para prepararse para una cita, y la mete en problemas con Georgia. mientras su relación laboral con Selena sigue desenvolviéndose, una rival traicionera, resurge para crearles problemas a Riley y familia.

Mientras la necesidad de su hijo de un modelo masculino lleva a Riley (Jennifer Love Hewitt) a pedir ayuda a su cuñado, la relación de Evan (Colin Egglesfield) con Selena (Alicia Lagano) se entromete.

El romance de Dee Ann con un cliente obliga a Georgia a tomar medidas drásticas. Y tras una perturbadora cena con Mark en su club de campo, Riley afronta eventos nuevos e inquietantes en casa.

Mientras lucha por afrontar el regreso de Kyle, Riley se encuentra repentinamente a cargo en The Rub. Manejar el negocio trae algunos desafíos inesperados, y Riley ve que la ida de Kyle cambió las cosas para siempre.